Hace unos días me escribió una persona para decirme:

“No quiero recibir más tus correos de mi3rda”.

A mí esto más que molestarme me da gracia.

Mira.

Todos pensamos que lo que alguien hace en algún lugar no está bien planteado.

Todos.

No hay nada en este mundo que sea para el consumo general de verdad.

A alguien no le gustan los tacos, el aguacate o el chocolate.

Hay gente a la que no le gusta la cerveza…

Yo no lo entiendo, pero así es y lo respeto porque realmente me da igual.

Así es la vida.

Así que cuando alguien me dice que no quiere recibir mis correos me parece bien.

Que me lo diga me parece innecesario pero me da igual jajaja

Sin embargo, lo entiendo.

Lo malo en todo caso es cuando tú no sabes por qué haces lo que haces.

Y le sucede a la mayoría de las personas.

Esta persona no quiere informarme, quiere discutir.

Quiere provocarme y que yo le conteste que se vaya a la mi3rda.

Pero no fue así.

Solo le indiqué la salida:

“Picas acá, acá y acá y no vuelves a saber de mí.”

En todo caso si tienes un negocio no debería preocuparte que la gente se dé de baja de tus correos.

Deberías preocuparte de que la gente no se dé de baja y que no vendas.

¿Sabes de qué listas la gente no se da de baja?

De las que no le dicen nada a las personas.

¿Y sabes qué listas no venden?

Ésas mismas.

Curiosamente sucede algo que además sé que sucede en varias listas de correos bien llevadas, no solo en la mía:

Los correos con más bajas suelen ser también los de más ventas.

Así que deja preocuparte.

Ponte a vender.