HAZ MÁS
DE LO QUE
HACES BIEN

Te lo recomiendo. Claro que también puedes hacer más de lo que te estresa, te hace infeliz y no haces bien… y fracasar de igual manera. En cualquier caso, lo que yo hago diario y hago bien es contar historias y escribir para vender, además de enseñar a otros a hacerlo.

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Copywriting

VENDO
ESCRIBIENDO

Presentar un presupuesto, argumentar un aumento, postularte a un nuevo trabajo, crear contenido que engancha… escribir para vender es posiblemente una de las habilidades más rentables que existen no solo para los negocios, sino para la vida.

Debes de saber que cientos de personas se han dado de baja de mi newsletter diaria, sin haber aprendido un carajo sobre escritura persuasiva… Sin embargo, otros cientos de personas han observado, aprendido e implementado. Siendo honesto, no depende de mí.

Para ambos tipos de personas, mi newsletter es gratuita y diaria, haciendo clic acá abajo.

AQUÍ IRÍAN
LOS TESTIMONIALES,
PERO EN SU LUGAR…
HAY UN RELATO

Muy posiblemente tú y yo no nos conocemos. Así que sería bueno que sepas que yo no estudié diseño, ni letras, ni un máster en copywriting, ni nada de eso… Me formé trabajando y cagándola haciendo cosas que en su momento no sabía hacer.

He trabajado con marcas de todos los tamaños, pero eso no debería de ser importante para ti. Cualquier persona con medianas habilidades de persuasión, podría arreglárselas para darle una charla al equipo de una marca reconocida, pedirles una encuesta de satisfacción y poner el logo de la empresa, bajo una leyenda que diga «empresas que confían en mí».

Así que hablemos sobre algo en lo que te recomiendo mucho más confiar: la intuición.

Cuando comencé con todo esto de vender formaciones y servicios, me devoraba libros y cursos de negocios, mentalidad y técnicas de marketing. Aprendí muy poco.

Todo que ver conmigo… leía y leía y leía, pero no hacía y no hacía y no hacía.

Mi intuición me decía que algo andaba mal, pero yo estaba convencido que tenía que saber más.

Nada más equivocado que eso.

La cosa es que necesitaba dejar de escuchar tutores, gurús, motivadores y opinólogos con sitios web llenos de logotipos, para comenzar a escucharme a mí. Es decir, a la voz interna que me decía: ponte a trabajar.

Así que lo hice. Y hasta la fecha no hay agradecimientos, palabras de aliento, ni logotipo de ninguna marca, que valga más como testimonial que haber puesto las manos en el trabajo.

En el fondo no hay palabras ajenas que puedan hablar por las tuyas. La cafetería que tu mejor amiga te recomendó, puede ser una pésima experiencia para ti. Es la vida y está bien que sea así.

Yo trabajo por hacer las cosas fáciles, útiles y prácticas para que personas como tú aprendan a tener mejores negocios, pero no puedo prometerte más que eso. Si te prometiera éxito, riqueza o ventas, te estaría mintiendo… y no tengo necesidad.

Dicho esto, lo demás te toca a ti.

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